Empecemos por ponernos en tema, ¿qué es el efecto Copycats?

Se le llama así a un efecto “contagio” cuando hablamos de un hecho real o ficticio que se replica de manera masiva. Es decir, cuando uno o varios imitadores aspiran a comportarse de igual manera que un modelo x.

El fenómeno en el tattoo

El fenómeno de copycats se refiere a copiar grandes modelos que por alguna razón son llamativos, originales y atraen mucho a la gente o seguidores, por lo que se convierten casi en “marcas registradas” o “sellos” característicos de un género en particular, un estilo, una moda, etc.

Esto se da en muchos ámbitos y obviamente el tatuaje no queda atrás.

Ya hemos hablado sobre la protección del derecho de autor que resguarda a los artistas, en este caso específicamente a los tatuadores, de que sus obras sean imitadas, pero al haber tan poca difusión sobre las leyes que amparan la problemática, este hecho ocurre de forma constante.

Son muchos los artistas del tatuaje que idean sus diseños desde 0, entregando en ellos toda su originalidad y talento, pero también, son muchos otros los que se aprovechan de la facilidad de ya tener un increíble boceto terminado al alcance de la mano, sin tener al parecer, ninguna consecuencia.

Y es así como recurren al famoso plagio, o como lo que se suele llamar el efecto copycats.

Beneficios y riesgos de publicar tus diseños en redes

Los y las tatuadoras hoy en día utilizan como herramienta principal de exhibición y divulgación de sus obras, las redes sociales. Estas plataformas propician un gran beneficio para el sector, ya que les ofrece una forma fácil de darse a conocer y que el público valore su trabajo y, por lo tanto, deseen obtener sus servicios, pero no todo corre a su favor.

Como consecuencia del impacto de Instagram y Pinterest, los tatuajes originales pertenecientes a un creador son replicados por una gran cantidad de personas que van imitando el diseño en cadena, uno a otro, pero sin necesariamente “robarlo” del artista propietario, ya que al suceder tan a menudo, se pierde el rastro y se desconoce su origen.

Podemos afirmar que principalmente son imitados los diseños de tatuajes de artistas de gran reputación, puesto que son dibujos de calidad y muy pedidos por la clientela. Quienes los copian, suelen ser tatuadores pequeños, los cuales no tienen un mayor alcance

“En el momento en que pones un tatuaje en Insta, está en toda la web y casi se espera que se copie en alguna parte. Sucede todos los días. Pero ningún artista de renombre copia el trabajo de otro artista”, comenta Avalon Todaro, artista de Melbourne, con respecto a la problemática.

También se debate acerca de cuándo es un copycat y cuándo es un diseño simplemente “inspirado” en el tatuaje de otro artista.

Sinceramente, es muy subjetivo y no existe un límite tan marcado, ya que depende de qué tan diferente sea ese diseño a su original. Es cuestión de comparar las similitudes y meditar si hubo intenciones de plagio directo, o si contiene solamente la esencia y algunas otras características que se generaron en honor a la pieza original.

“Si un tatuaje ha sido copiado línea por línea, eso es realmente desalentador, pero no hay nada de malo en estar inspirado. Las personas pueden mostrar el diseño a su tatuador local y localizar al artista original o volver a dibujar el concepto para hacerlo único” agrega Todaro.

Lo cierto es que, como la información de lo que se debe hacer al respecto en una situación de infracción a los derechos de autor no es algo de corriente conocimiento, los copycats ocurren diariamente.

Pero si bien no se recurre comúnmente a las consecuencias de la ley civil o penal (en algunos casos si), siempre hay una repercusión social en el que la comunidad de artistas repudia el hecho de plagio.

Con ayuda de otros usuarios es más fácil que otras personas se sumen a la iniciativa y así, el tatuador que imitó la obra original, tiene como resultado una lamentable reputación que lo posiciona como un mal tatuador.

Ser buen profesional es valorar el trabajo del otro

El respeto entre los artistas es crucial para convivir en armonía dentro de la cultura de los tatuajes. No es delito admirar las obras realizadas por un colega, siempre y cuando se proceda de manera correcta en caso de tomarla como punto de partida.

Por lo que, recomendamos que cuando quieras rendir honor al diseño de un artista o simplemente usarlo como inspiración, tomes las medidas necesarias para evitar infringir las normas del derecho de autor.

Recuerda que siempre será menos arriesgado crear tu propia obra original desde cero, algo que solo puedes conseguir a través del dibujo; habilidad esencial para tatuar, la cual enseñamos al detalle en nuestro MasterCourse: Tatuaje Realista, con Coreh López.