¿Qué es y cómo lograr un ‘blast over’ en tatuajes?
Consejos para cubrir parcialmente los tatuajes viejos
8/8/2023
Muchas personas están decidiendo tatuarse nuevos diseños sobre sus tatuajes viejos de una manera única.
Cuando antes bastaba con un cover up, ahora quienes se dedican al tatuaje están elevando un poco más la apuesta con los blast over.
¿Quieres conocer la última tendencia que le da otra vida a los tatuajes? Quédate para aprender cómo practicarla de manera segura.
¿Qué es un ‘blast over’?
Un blast over es una técnica que se ha empezado a popularizar más fuertemente a partir del 2019. Se trata de hacer un tatuaje encima de otro, pero sin taparlo completamente.
La idea de estos tatuajes no es hacer un cover up, sino, por el contrario, lo que se busca es lograr que ambos tatuajes, el viejo y el nuevo, funcionen juntos. Con esta técnica se tapan los tatuajes viejos ligeramente por medio de capas, pero en donde cada una funciona perfectamente por separado y orgánicamente en su conjunto.
Y para lograrlo, se necesita trabajar con diseños más bien simples y sintéticos, es decir, que no tengan muchas sombras, filigranas ni estén sobrecargados en detalles.
La razón es la siguiente: el tatuaje viejo funciona como fondo y lo que se busca es que el nuevo destaque y pase a ser el protagonista. Si ambos tatuajes fueran igual de complejos, lograrías un resultado inteligible y a final de cuentas, ninguno destacaría.
Es por esto que en la técnica blast over se trabaja con líneas gruesas y bien pigmentadas, ya que ayudan a conseguir el efecto figura-fondo de manera efectiva.
Hay muchas personas que se confunden esta técnica con otras similares como los cover ups o blackouts, pero para evitar confusiones hagamos una distinción:
- Cover up: busca cubrir el tatuaje por completo con otro tatuaje.
- Blackout: busca cubrir con negro sólido una gran superficie, y no solo el tatuaje que se quiere tapar, sino también un poco más.
- Blast over: se tatúa por encima, pero se incluye el tatuaje viejo en el diseño y este funciona como background.
Sin embargo, por más que parezca algo sencillo de hacer, no lo es. Diseñar un blast over que funcione perfectamente es algo muy complejo de lograr y que requiere de mucho conocimiento. Por eso, no es una técnica recomendada para principiantes.
Te explicamos.
Ten en cuenta que debes tener muchos conocimientos de composición, porque tienes que lograr que todo quede armónico. Por eso, no te apures al diseñar, tómate tu tiempo para probar más de una posibilidad y conversa con el cliente para llegar a la mejor opción.
Además, hay otro punto muy importante. Tatuar sobre una piel ya tatuada, es una experiencia muy diferente a tatuar por primera vez. En algunos casos, pueden hincharse y enrojecerse más de lo normal, o incluso pueden ser más propensas a heridas.
Pero a no desanimarse, un blast over bien hecho puede quedar genial.
¿Qué beneficios tiene el blast over?
Te preguntarás por qué alguien elegiría un blast over antes que un cover up. Bueno, la realidad es que muchas personas ya no se sienten identificadas con sus tatuajes viejos, pero en muchas ocasiones no lo suficiente como para taparlos completamente o eliminarlos con láser.
Es por esto que el uso de esta técnica permite renovar la tinta vieja y llevarla a un siguiente nivel. Hay muchas personas que no se sienten a gusto con apenas una parte de su tatuaje viejo y, por el contrario, quieren preservar algunas zonas y colores. Para ello, el blast over es ideal.
Así que, resumiendo, algunos de los beneficios son:
- Permiten reversionar tatuajes viejos que ya no agradan.
- Tapar zonas de un tatuaje que se haya borrado.
- Poder mejorar tatuajes que estén mal hechos.
¿Cómo hacer que un blast over quede armónico?
Para alguien que no tiene experiencia en composición, sería muy fácil equivocarse y hacer que el tatuaje luzca desparejo y mal. Para evitarte problemas, aquí te dejamos algunos consejos:
- Haz diseños simples, con líneas gruesas y sólidas. No te compliques la vida diseñando tatuajes con muchos detalles, estos no corresponden a un blast over. Además, si lo haces, es muy probable que el resultado final sea un tatuaje que no se entiende ni se distingue. Recuerda que un blast over tiene que sobresalir, destacar y utilizar el tatuaje viejo como fondo; y para lograrlo, la simpleza y la dureza en los trazos es indispensable.
- Estudia en profundidad el tatuaje viejo. Fíjate cuáles son las zonas con mayor concentración de tinta y, sobre todo, detecta si hay zonas en las que hay exceso de tinta negra. En ese caso, deberás considerar esto para que el diseño nuevo luego “no se pierda” con el anterior y pueda destacarse mucho mejor.
- Pregúntale al cliente cuáles son las zonas del tatuaje que menos le gustan. Esto es muy importante para determinar algunos límites. Es posible que el cliente esté insatisfecho con el tatuaje viejo en general, lo cual esto es algo que te beneficia porque podrías trabajar más libremente y cualquier zona que tapes con el nuevo tatuaje no sería un inconveniente. Pero, en caso de que el cliente te indique que hay zonas que si o si quiere tapar y otras que le gustaría dejar en descubierto, condiciona al nuevo diseño. La comunicación, el diálogo y tu creatividad aquí son fundamentales.
- A la hora de diseñar y componer, recuerda que las tintas negras y los colores muy pigmentados compiten entre sí. Por eso, para el nuevo tatuaje, utiliza tintas con una buena concentración de color para que los trazos se destaquen mucho mejor y cobren protagonismo. Si quieres saber más sobre qué tintas negras utilizar, entra aquí que te dejamos un listado con las marcas más utilizadas para tatuar con tinta negra de la mejor manera.
Bonus tip: hay personas que, antes de hacerse un blast over, deciden acudir a algunas sesiones de eliminación láser para poder bajar la intensidad de los colores del tatuaje viejo y hacer que el nuevo se vea mucho más nítido. En caso de que sea muy necesario, puedes hablar con tu cliente para considerar esta opción.
¿Es una buena idea hacer un blast over con Blackwork?
Podríamos decir que sí, pero ten cuidado, porque no todos los trabajos se adaptan igual.
Así como algunos diseños Blackwork sólidos bien podrían servir para contrastar algo ya tatuado, hay otros compuestos únicamente de líneas que también podrían funcionar muy bien para hacer un blast over.
Todo dependerá de cómo sea la pieza original y cómo se la integre con el diseño Blackwork.
Por eso te recomendamos que al pensar el tatuaje enfoques tu atención en la composición y la armonía del diseño final.
White over, otra opción para mejorar un tatuaje
El white over se trata de hacer un nuevo tatuaje con tinta blanca sobre un blackout.
Como en el blast over, estos tatuajes se hacen con líneas muy simplificadas y muy cargadas en pigmento, priorizando tatuar diseños sin muchas sombras ni detalles.
Pero hay algo a tener en cuenta, la tinta blanca suele ser compleja de tatuar, ya que su composición densa hace que sea más dificultosa de penetrar en la piel. Más sí la tatuamos sobre un relleno sólido color negro.
Además, te comentábamos en la nota Tatuajes con tinta blanca, ¿son una buena opción? que estas tintas sufren varias alteraciones con el tiempo como, por ejemplo, volverse más amarillentas y borrarse en ciertas partes debido a la incidencia del sol.
Los tatuajes hechos con tintas blancas son muy atractivos y en los primeros días quedan muy bien, pero luego al transcurrir unos meses, la situación cambia. Cuando se trata de white overs, por lo general, se necesita repasar las líneas luego de unos meses para fijar bien el color y hacer que tenga más consistencia.
Además, salvo excepciones, la mayoría de los blackouts se hacen para cubrir otros tatuajes, por eso tienes que tener en cuenta que debajo de ellos hay un tatuaje viejo.
Tatuar sobre una piel sobrecargada en tinta es algo complejo y puede afectar directamente al white over. Por otro lado, pinchar una misma zona muchas veces hasta puede generar algún tipo de trauma en la piel, por eso se debe trabajar con mucho cuidado y no es recomendable para personas con poca experiencia.
Como esta técnica está más vigente desde el 2019, es posible que no podamos determinar si estos tatuajes se preservan bien en su totalidad o no.
Mientras tanto, puedes ver los trabajos de algunos profesionales que llevan años de experiencia y que logran tatuajes con mucho nivel.
La artista Jessi Manchester es una experta en esto. Ella no solo tatúa con blanco, sino que trabaja con gris y líneas negras muy pigmentadas. En la mayoría de las ocasiones es ella también la que se encarga de hacer el Blackout, pero lo hace con una particularidad: no rellena todo con negro puro, sino que en ciertas zonas tatúa con gris.
De esta forma, el relleno no queda tan intenso y esto le permite trabajar por encima con colores más fuertes o más claros, haciendo que destaquen perfectamente.
Otro tatuador experto es Nathan Mould quien realiza trabajos de whiteover, pero de forma más tradicional, sin demasiadas variaciones en las tonalidades ni escalas de grises, como lo hace Jessi Manchester.
El artista Aquarianttt logra diseños realmente únicos trabajando principalmente con tinta negra, aunque en ocasiones hace algunas combinaciones en tonalidades. Este artista, de hecho, ha hecho colaboraciones con Jessi Manchester.
O incluso el mismo Pitta Kkm se ha lanzado a realizar este tipo de trabajos, plasmando su estilo personal de maneras muy impresionantes.
Como ves, hay infinidad de posibilidades para crear blast-overs impactantes; y cada vez son más las personas que escogen esta alternativa para darle una segunda vida a su tatuaje sin necesidad de pasar por el láser.
Sin duda, este atractivo estilo vino para quedarse y todavía tiene muchísimo que ofrecer. Eso sí, para poder ejecutarlo con éxito sin comprometer tanto la pieza original como la nueva, hace falta tener bien aprendidas y practicadas las técnicas que lo caracterizan.
Un gran aliado para ello es el Blackwork, ya que se comprende mayoritariamente de líneas, rellenos sólidos negros, y altos contrastes de tinta y reservas de piel. Por lo que, todo aquel que ya lo tatúe, lleva algo de ventaja.
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