Llegar a un estilo que te defina es una de las tareas más complejas que hay en el mundo del tatuaje, porque requiere de mucho conocimiento y es algo que se forma con los años.

Lograr que la gente vea tus tatuajes y reconozca que son tuyos solo por cómo están hechos es algo que lleva tiempo conseguir.

Pero sin dudas ir en búsqueda de un estilo propio es la parte más divertida de todas, porque ahí podrás ser libre de decidir qué es lo que realmente quieres en tus tatuajes y cómo quieres enfocar tu carrera.

¿Quieres saber más? Entremos en detalle.

El estilo

El estilo no es algo que se pueda forzar, sino que aparece con los años y con la experiencia.

Es por esto que, sobre todo para principiantes, es mejor consolidar primero una buena base del tatuaje, aprendiendo distintos estilos para que poco a poco se vaya formando la personalidad en los diseños.

Con una buena base de conocimientos sobre el tatuaje en general, es posible jugar y experimentar mucho mejor, porque tendrás con ellas las herramientas necesarias para desenvolverte con libertad.

Pero detallemos algunos puntos importantes a tener en cuenta.

Cómo delimitar tu estilo

Como artista, no debes olvidar que también ofreces un producto que quieres que al resto le llame la atención y lo compre.

Esto no es algo malo, al contrario, pensarlo de esta manera sirve de incentivo para buscar aquello original que te represente y que no se haya hecho antes, tomar los estilos que más te gustan y adaptarlos a tu manera.

El trabajo será ir perfeccionando más y más hasta poder detectar aquellos elementos que te distinguen.

Un ejercicio muy útil para esto es realizarte algunas preguntas tales como:

¿Qué estilos me atraen más que otros y por qué? ¿Qué es lo que más me llama la atención de cada uno de ellos?

¿Prefiero tatuar con tintas negras o a color?

¿Cómo son mis trazos? ¿Prefiero trazos gruesos o líneas finas?

Esto te ayudará a ir seleccionando lo que más te interese de una forma clara y práctica, y se convertirá en una especie de guía a la hora de crear tus propios diseños.

Escribe las respuestas en un papel y realiza un punteo con los elementos más importantes.

Por otro lado, revisa ¿Cuánto tiempo le dedicas al dibujo? Tatuar no solo consta en ir por la vida pinchando personas porque sí. Si no que requiere de mucho entrenamiento y en esto el dibujo es fundamental.

Dibujar ejercita también la vista y con esto descubrirás qué se te da mejor hacer y qué es lo que más te mola diseñar. Si quieres saber más sobre el tema, entra aquí y Aprende a dibujar para tatuar.

¿Cómo darte cuenta cuándo has encontrado tu estilo?

Bueno, lo llamativo es que cada vez los tatuajes que realices se van a empezar a parecer más, y no por falta de ingenio, sino porque sin que te des cuenta vas a empezar a preferir un tipo de trazo, una gama de colores, un tipo de tatuajes, determinadas técnicas, etc.

El estilo que te va a caracterizar como profesional, es el que formas con tus gustos y preferencias.

Si dedicas tiempo y esfuerzo a la práctica, con el tiempo verás que tus clientes comenzarán a pedirte que les tatúes tus propios diseños y esto es algo muy positivo.

Hay algunos tatuadores que ya no tatúan otros diseños que no sean los suyos, aunque esto depende de las preferencias y necesidades de cada artista.

El desafío radica en la creatividad y en la posibilidad de poder adaptar los diseños de maneras innovadoras y muy personales. Entiende que lo que tú puedas ofrecer, tiene que ser distinto, tiene que resaltar y destacar.

Cada persona es única e irrepetible, por eso, te invitamos a hacer un trabajo de introspección para poder plasmar aquello que te hace diferente a los demás en tus tatuajes.

Inspirarte vs. Copiar: qué debes hacer y qué no

Lo principal es saber discriminar bien estos verbos: una cosa es inspirarte y otra muy diferente es copiar.

¿Has escuchado la frase “todos los artistas roban”? ¿O "que todo ya está inventado”? Bueno, hay parte cierta y parte que no.

Tomar el trabajo de colegas como inspiración está bien, siempre que sepas aplicarlo a tu manera y hacer algo nuevo y distinto. Pero si, en cambio, solo copias y robas exactamente diseños de otra persona, eso está mal, y no solo mal, está MUY MAL (y si, te lo decimos en mayúsculas y gritando para que quede claro).

Hay algo que se llama copyright y refiere al derecho de autor. Cada creación artística inédita tiene derecho de autor y esto es algo sagrado que debe respetarse siempre, no importa cuándo leas esto.

No copiar y solo inspirarte es algo que lleva muchísimo tiempo. Distingamos una salvedad: para practicar y solo practicar, no está mal que copies algún diseño, sobre todo si eres principiante.

De hecho, hay plantillas diseñadas especialmente para este tipo de uso, como son los tatuajes “Flash”. Si bien, hay muchos artistas que diseñan sus propios tatuajes Flash, puedes comprar plantillas que ya están pensadas para practicantes.

Si quieres saber más sobre esto, te invitamos a leer la nota Flash Tattoo, tatuajes en poco tiempo.

Pero recuerda, nunca copies el trabajo de otro artista.

El trabajo de otro tiene un valor y un mérito que es esencial que los puedas ver. El o la artista seguramente dedicó mucho tiempo y práctica para llegar a un diseño personal, entonces, no quieras pasarte por encima de ello.

La inspiración no es copia, es apertura a la creatividad. Es tomar algo existente y transformarlo hasta hacerlo propio, imprimiéndole tu sello personal con elementos que te representen.

No te compares

Para cualquier artista, sea de la rama que sea, tomar como referencia el trabajo de otros es muy sano y de hecho es muy importante. Pero cuidado en no caer en la comparación, porque esto puede producir el efecto contrario en ti.

Es decir, muchos confunden tomar inspiración con querer parecerse a, y esto no es correcto. Cada tatuador toma caminos muy diferentes porque sus historias son diferentes y porque, vale, son personas diferentes.

Entender que no hay caminos mejores o peores es fundamental para tu crecimiento y tu seguridad. Las posibilidades de cada quien son muy distintas y es casi imposible decir que hay una sola y única manera “correcta” para ser tatuador.

Así que, a no desesperar y olvídate de compararte, eso muchas veces conduce a frustraciones y al fin de cuentas solo lograrás estancarte.

Relación tatuador-cliente

Este punto es fun-da-men-tal, ¿por qué? Porque tener buen trato y ser amable con los clientes es lo que hará que te destaques por sobre otras personas, no solo tus diseños innovadores.

Aquí es importante tener muy en cuenta que tatuar no consta solo de hacer un dibujo y ya. Error. Tu cliente está confiándote su cuerpo para que le imprimas por siempre tu trabajo. Entonces, sé considerado y trátalo de la misma manera que te gustaría que lo hagan contigo.

Si bien el intercambio es por dinero, hay muchos otros factores puestos en juego. Es por esto que es necesaria cierta química y sobre todo brindar confianza, y esto lo aprenderás con el tiempo.

Un buen trato también es parte de un buen desarrollo comercial y no basta con ser solo buen artista. El cliente pasa muchas horas contigo y el tatuaje, en definitiva, termina siendo una experiencia.

Sobre esto, ampliamos mucho más en la nota Relación tatuador-cliente: red flags y consejos. Es sumamente importante que sepas ser un buen profesional.

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