Desafíos de tatuar con agujas 3RL

Si buscas una aguja que te ayude a trabajar con alta precisión y detalle, puede que la 3RL sea ideal para ti.

Son varias las ventajas de tatuar con agujas 3RL, pero no te vamos a mentir, también suponen algunos desafíos que deberías de tener en cuenta si quieres sacarle el mayor provecho.

Así que, tanto si ya te habías propuesto trabajar con ellas como si no las habías contemplado siquiera, quédate porque hoy aprenderás sus dificultades y cómo atajarlas antes de que se conviertan en un problema.

1) Back up de agujas

Técnicas de sombreado como el Whip Shading y similares suelen ser exigentes para las agujas 3RL, ya que al buscar este tipo de efectos y texturas, sus tres agujas se van abriendo y perdiendo filo poco a poco.

Por lo que, de no cambiarlas en su debido momento durante la sesión, podrías generar irregularidades en el aspecto final del tatuaje.

Es por eso que al usar este tipo de técnicas con 3RL, conviene tener siempre en el banquillo unas cuantas agujas y cartuchos más.

2) Composición de las tintas

Tatuar con tinta negra suele facilitar tanto la sesión como el resultado final, ya que la piel asimila mejor su composición. Ahora, hacerlo con colores es otra historia, sobre todo porque cambia su densidad.

¿Y qué tiene que ver esto con la 3RL?

Pues, que al ser agujas finas de tipo Bugpin* y cargar menos cantidad de tinta, hay más probabilidad de ocasionar líneas irregulares o una apariencia desigual del color.

Para tatuar con colores, suelen ir mejor las agujas de configuración más amplia, como son por ejemplo las Magnum, ya que permiten una mayor carga de pigmento y una distribución más uniforme.

De todas formas, no lo tomes como una imposibilidad; con un set de habilidades bien entrenadas y pulidas, puedes superar este desafío sin problema.

* ¿Qué rayos es Bugpin? 👀, resuelve este enigma y muchos otros con nuestro Glosario de terminología de tatuaje.

3) Práctica y confianza ante todo

En teoría, tatuar con agujas de configuración pequeña suele ser complejo, sobre todo para quienes no tienen experiencia previa, ya que siempre existe el riesgo de que las líneas queden torcidas, se peten o acabes lastimando a tu cliente.

Pero en la práctica, si tomas todas las precauciones necesarias, te informas bien con alguien que haya superado el desafío y practicas lo suficiente antes de tatuar piel real, se pueden reducir muchísimo los riesgos de tatuar con 3RL.

E incluso, se puede convertir en tu aguja estrella.

Así lo ha demostrado el tatuador Roger Monlix, quien después de años de prueba y error, y gracias a haber desarrollado un sólido arsenal de técnicas que te permiten tatuarlo todo con 3RL (incluso si no consigues hacer líneas del tirón), hoy logra piezas espectaculares tatuando únicamente con esta aguja.

Por eso hemos creado en conjunto una práctica solución para todo quien quiera dominar una de las agujas más versátiles y delicadas que hay, Seminario: Iniciación al Tatuaje 3RL

4) Profundidad al tatuar

Su configuración demanda un buen control y cuidado de la técnica; de no tenerlo en cuenta, podrías pasarte de la dermis y pinchar erróneamente la hipodermis, generando un dolor innecesario a tu cliente, e incluso un posible blowout en el tatuaje.

Ahora, una vez le pillas el truco, se puede convertir en una gran aliada a la hora de tatuar delicadas piezas que no demanden un proceso de curación complejo y riesgoso, como podría ser el de, por ejemplo, un Blackwork con grandes áreas de relleno sólido negro.

5) ¡Paciencia imprescindible!

Si bien este rasgo es fundamental para el arte de tatuar en sí, agujas como la 3RL suelen demandar un grado más alto de paciencia, por la infinidad de detalles y texturas que se pueden conseguir, a diferencia de agujas de mayor porte que van rellenando áreas más amplias de la piel en menor tiempo.

Lo sabemos, con la cultura de la inmediatez en la cual vivimos actualmente, cada vez se vuelve más difícil dedicar el tiempo adecuado; pero créenos, en el arte del tatuaje, acelerar los procesos no lleva a nada bueno…

Tatuar no es una carrera de velocidad, sino de fondo.

Cada línea es un aprendizaje, cada tatuaje es una lección para mejorar tu técnica y convertirte en mejor profesional.

Cuando se trata de crear detalles precisos y de calidad, el tiempo premia y la paciencia recompensa. Y si brindar los mejores resultados conlleva tatuar durante más horas o incluso sesiones, ¡que así sea!

Ya ves que la aguja 3RL presenta algunos desafíos que bien podrían hacerte dudar de si estás listo para tatuar con ella…

Pero, ¿sabías que puedes reducir sus riesgos al punto de convertirla en tu aguja predilecta para tatuarlo TODO?

Y con ‘todo’ nos referimos a líneas, sombreados, rellenos, degradados, texturas, volumen, contrastes… Así es, esta aguja es tan versátil y permisiva que la puedes usar para resolver un tatuaje de principio a fin sin necesidad de complicarte la vida.

Eso sí, para lograrlo hace falta contar con un buen combo de técnicas que te ayuden a sacarle todo el provecho posible.

Lo bueno es que ya nos hemos adelantado a lo que necesitas y hemos creado una guía práctica paso a paso de la mano de un experto en técnica 3RL que ha conseguido llenar su agenda sin cambiar de configuración de aguja, ¡jamás!

Sí, has leído bien, ES posible tatuar a tu manera sin tener que pasar por trazos robustos, máquinas pesadas y complejos procesos de curación. Y te lo demuestra Roger Monlix en nuestro nuevo Seminario: Iniciación al Tatuaje 3RL.